En 1812, un día como hoy nació en Monforte de Lemos, España, el químico y farmacéutico Antonio Jacobo Casares Rodríguez, pionero del análisis químico y uno de los iniciadores de la espectroscopía. Su extraordinaria cultura y capacidad de trabajo le permitieron dejar huella en diferentes campos del conocimiento.
Aplicó la investigación a la agricultura y caracterizó las aguas medicinales gallegas. Elaboró los primeros anestésicos para operaciones quirúrgicas al sintetizar el cloroformo y el éter; obtuvo luz eléctrica mediante arco voltaico y descubrió los minerales morenosita y zaratita. A él se deben los primeros estudios en profundidad sobre las fuentes de aguas medicinales y vinos gallegos.
Su legado es reconocido por la comunidad científica española, tanto por la variedad de sus hallazgos en su faceta investigadora, como por su concepción práctica e innovadora de la docencia. Falleció en Santiago de Compostela el 28 de abril de 1888.