El 18 de abril de 1940, en Sumter, Carolina del Sur, Estados Unidos, nació Joseph Leonard Goldstein, quien obtuvo en 1985 el Premio Nobel de Fisiología o Medicina que compartió con su colega Michael S. Brown por sus estudios sobre el metabolismo del colesterol en el ser humano, y especialmente por el descubrimiento de receptores celulares relacionados con el colesterol.
Estás investigaciones, que surgieron por el interés común de Goldstein y Brown por el estudio de los lípidos y las causas del hipercolesterolemia, tratan sobre los procesos que afectan a la acumulación del colesterol en la sangre, en el transcurso de su investigación descubrieron las lipoproteínas de baja densidad (LDL, colesterol malo), que se asocian directamente con el riesgo cardiovascular, y la existencia de unos receptores celulares que permiten a las células atrapar dichas lipoproteínas y retirarlas de la circulación sanguínea.
Asimismo, demostraron que la ausencia —por causa genética— de estos receptores de LDL es el origen de la hipercolesterolemia familiar y sus efectos patológicos: arteriosclerosis y enfermedad coronaria. La constatación de estos receptores celulares en la regulación de los niveles de colesterol sanguíneo dio pauta para la síntesis de medicamentos, para inducir la formación de estos receptores.
