El 21 de julio de 2014 se llevó a cabo el primer arresto logrado por medio de la identificación del patrón del dorso de la mano, con la técnica desarrollada por la antropóloga forense y anatomista escocesa, Susan Margaret Black.
Black innovó el desarrollo de técnicas y la construcción de base de datos para confirmar la identidad de alguien, con base en fotografías de sus manos o brazos. Esta técnica es de suma importancia para el enjuiciamiento de pedófilos. Black usó un análisis de patrones de venas para confirmar la identidad de un presunto abusador de niños, quien luego se declaró culpable.
La científica colaboró, además, en la identificación de víctimas en varios conflictos bélicos en Kosovo, Sierra Leona, Isla Granada e Irak; así como del tsunami de Sumatra. Desde hace más de treinta años se dedica a reconstruir historias a partir de restos humanos.
Por su contribución a la ciencia y humanidad, recibió un título honorífico de Doctora en Medicina de la Universidad de St. Andrews del Reino Unido y es miembro vitalicio de la Cámara de los Lores, con el título de Baronesa Black de Strome.